Las alumnas aprenden a través del currículo correspondiente a su edad, al tiempo que se les ayuda de manera individualizada a que desarrollen sus capacidades y personalidad de forma armónica.

A lo largo del proceso de enseñanza-aprendizaje, tanto en el ámbito académico como en el personal e intrapersonal, la alumna debe ir construyendo un conocimiento de sí misma y de la realidad socio-cultural que le rodea. Partiendo de esto, irá tomando decisiones en relación a su itinerario académico y a su desarrollo personal, que debe estar estrechamente ligado a la autoestima, el respeto por una misma, el dominio de su voluntad, el esfuerzo personal, el desarrollo de habilidades sociales y la potenciación de sus capacidades.

Los planes de formación humana y cristiana del colegio contemplan estos contenidos como imprescindibles en la formación integral de nuestras alumnas, para que aprendan a ser felices y afronten la vida con entusiasmo y espíritu de servicio a los demás.