El 19 de abril el director del hospital Aita Menni, Mikel Tellaeche, impartió una sesión a las alumnas de Bachillerato para contarles la situación de Liberia y la labor que allí realizan tanto las Hermanas Hospitalarias como los Hermanos de San Juan de Dios.
Mikel comenzó explicando la historia y la situación actual de Liberia; un país con una corta historia pero con varias guerras civiles, corrupción y, como consecuencia, mucha pobreza. Con una población de algo más de 4 millones de personas, cuenta tan sólo con 150 médicos, la mitad de los cuales se dedican a labores de gestión, es decir, no atienden a pacientes.
El hospital Saint Joseph de los Hermanos de San Juan de Dios es el más grande y mejor equipado de toda Liberia y realiza una labor insustituible al servicio de toda la población. Debido a la epidemia de Ébola de 2014, en la que fallecieron más de once mil personas, entre ellas 8 trabajadores del hospital, tuvo que ser cerrado. Cuatro meses después se reabrió, pero con una capacidad de asistencia muy limitada, debida, en parte, a la necesidad de mantener las medidas de seguridad necesarias frente al Ébola. Con el paso del tiempo el hospital ha ido poco a poco recobrando la actividad.
Por su parte, las Hermanas Hospitalarias atienden un centro de salud mental – el único de Liberia- y han puesto en marcha recientemente el programa “We are like you” con el que persiguen mejorar y ampliar el servicio que presten a los enfermos mentales, los olvidados de los olvidados de África. Debido a la falta de formación de casi toda la población, estos enfermos se consideran un castigo de Dios y, por ello, son apartados e, incluso, encadenados.