“Trabajar en un colegio es algo muy especial por la trascendencia que tiene su misión”

1) Marta, este curso te despides como directora de Eskibel después de 16 años desempeñando esta tarea, ¿Qué te llevas en las alforjas? ¿Qué es lo que más te ha enriquecido?

Estoy agradecidísima a los veinticuatro años que he trabajado en Eskibel por todo lo que me han aportado tanto profesional como personalmente. En este tiempo he aprendido y he experimentado tanto en el colegio que, en el año de excedencia que he pedido, quiero tener tiempo para poder recapacitar sobre todo ello y profundizar en algunos aspectos para volver el curso que viene y seguir aportando al colegio lo mejor de mí. 

Trabajar en un colegio es algo muy especial por la trascendencia que tiene su misión que, de manera muy resumida podría decir que es preparar a los alumnos, junto con sus familias, para que sean felices y hagan felices a los demás. Para que sean felices, tenemos que enseñarles a ser buenas personas. ¿Y qué es ser una buena persona? Tenemos la suerte de tener el mejor modelo, Jesucristo. Esto que se decide fácil y rápido, es algo que se construye cada día a través de muchos detalles de la vida escolar y respetando siempre la libertad de cada persona. Lógicamente, en este proceso hemos ir de la mano de la familia que, en estos tiempos de cambios sociales y culturales, debemos reforzar y apoyar porque es la base para construir una sociedad fuerte y sólida. 

Por otro lado, trabajar en un colegio es un regalo cada día. Ver la ilusión, la inocencia, la capacidad de admiración de los alumnos, especialmente de los más pequeños, es algo que no deja de sorprenderme y de reafirmar mi vocación por la enseñanza. Con las alumnas mayores, el poder acompañarlas a lo largo de su proceso de maduración, en sus momentos de incertidumbre, de dudas, en sus éxitos… es también muy satisfactorio. Por otro lado, la relación que he tenido con las familias en estos años ha sido muy enriquecedora. 

 

2) Marta: ¿Qué balance haces de este curso? 

Este curso ha supuesto un gran reto para todos (familias, profesoras, personal del colegio y alumnos) que hemos superado con sobresaliente. Comenzamos en septiembre con la ilusión de volver a tener a todos los alumnos en el colegio, de recuperar las clases presenciales pero, a la vez, con la incertidumbre sobre cómo se desarrollaría el curso escolar. Con la colaboración de todos hemos sido capaces de gestionar las situaciones que se han ido generando a lo largo del curso. Tenemos que resaltar la ayuda que nos ha prestado Osakidetza y el apoyo de las familias a la hora de aplicar las indicaciones recibidas. No puedo dejar de reconocer el esfuerzo extra de las familias de los alumnos de 3 años que han tenido que “padecer” tres confinamientos a lo largo del curso.

 

3) ¿Qué noticias del colegio destacarías de este curso tan atípico?

Yo destacaría dos aspectos: primero, la facilidad con la que se han adaptado nuestros alumnos a las medidas del protocolo Covid. A pesar de todas las limitaciones han sido capaces de trabajar y disfrutar del día a día en el colegio. 

El segundo aspecto que destacaría, el gran rendimiento académico que han logrado nuestros alumnos en este curso escolar, fruto del gran trabajo del profesorado y el alumnado. Se ha podido impartir toda la programación de las asignaturas y, a pesar de que algunos alumnos han pasado periodos de confinamiento, han seguido las clases online sin dificultad y se han podido reincorporar con facilidad al finalizar este tiempo. El profesorado, por su parte, ha hecho un esfuerzo importante para atender a los alumnos confinados, para adaptar el sistema de enseñanza y para flexibilizar, cuando ha hecho falta, las fechas actividades de evaluación.

 

4) ¿El colegio ha estado preparado para afrontar el reto tecnológico que ha sido crucial para combinar la enseñanza online y presencial? 

El concepto “reto tecnológico” abarca muchos aspectos que darían para escribir muchísimo. Habría que distinguir entre los medios tecnológicos para impartir las clases online y la metodología de estas. Respecto a los medios tecnológicos, a comienzos de curso se adquirieron cámaras para todas las clases con el fin de que los alumnos confinados pudieran seguir las clases presenciales desde casa. En relación a la metodología de las clases online, el periodo de confinamiento del curso pasado nos hizo replantearnos que no podía ser la misma que la de las clases presenciales. Tuvimos que llevar a cabo una formación de manera urgente y intensiva para poder aplicar herramientas nuevas que nos permitieran llevar a cabo las clases de la manera más eficiente posible. Muchas de las cosas que aprendimos y experimentamos las hemos incorporado este curso a nuestras clases presenciales. Todavía nos queda camino por recorrer pero, si algo hemos aprendido, es que la relación personal de la profesora con cada alumno nunca será superada por la mejor clase online. 

 

5) Este año, debido a la pandemia, los alumnos han necesitado más socializar, venir al colegio, ser atendidos por el profesorado….¿cómo lo habéis percibido desde el colegio? 

¡No solo los alumnos sino también las profesoras y los padres! Claramente las personas somos seres sociales y necesitamos relacionarnos, mirarnos a los ojos cara a cara, emocionarnos juntos… Todos estábamos deseando volver a encontrarnos y volver a retomar esa comunicación directa e instantánea. 

El protocolo COVID del colegio ha hecho que multipliquemos el personal que atendía los momentos del comedor, recreos y las entradas y salidas del colegio. Eso ha hecho que tengamos una mayor relación con todos los alumnos. Ha sido muy gratificante poder compartir más tiempo con ellos. Muchas profesoras del colegio pueden decir que han visto a los más de cuatrocientos alumnos del colegio todos y cada uno de los días del curso. 

 

6) ¿Cómo han terminado las alumnas de 2º de Bachillerato?

Nuestras alumnas de 2º Bachillerato han realizado un curso excelente. Conscientes de la importancia de este curso para su futuro profesional y, ante el temor de que en algún momento se pudiera volver a las clases online, han trabajado con intensidad a lo largo de todo el curso, algo que se ha visto reflejado en sus expedientes académicos. Aunque no hayamos podido llevar a cabo algunas de las actividades propias de este curso, pudimos poner el broche a su paso por el colegio, celebrando la imposición de becas, ante el resto de alumnas del colegio, y el acto de despedida con sus familias.  

 

7) ¿Cuáles son las señas de identidad del colegio? ¿Qué es lo que más aprecian los padres?

La seña de identidad del colegio es “la persona, lo primero” que se concreta a través de la atención personalizada. Creo que este año hemos intentado cumplirlo más que nunca y que, además, ha brotado de manera natural entre todo el profesorado y personal del colegio. 

 

8) ¿Cuál es el estilo educativo del colegio? ¿Aquello por lo que son reconocidas nuestras alumnas cuando terminan su etapa escolar?

Creo que hay dos rasgos del colegio, inspirados por san Josemaría, que están presentes en el día a día del colegio: el trabajo bien hecho y la alegría. El trabajo bien hecho, por un lado, requiere que las profesoras nos preparemos bien nuestras clases, tengamos un sistema de evaluación coherente, atendamos a las alumnas a las que les cuesta un poco más adquirir los objetivos de la asignatura… por otro lado, se refleja en la exigencia con las alumnas: seguimiento en el cumplimiento de los deberes, la buena presentación en los trabajos, el cuidado de los detalles… todo ello hace que cada alumno pueda lograr el máximo desarrollo de sus competencias y habilidades. 

Respecto a la alegría, queremos que en Eskibel se transmita esta virtud tan importante, basada en que somos hijos de Dios y que, por tanto, pase lo que pase, Él nos cuida siempre y nos lleva de su mano. Todo lo que hagamos cada día, grande o pequeño, en privado o en público, si lo hacemos bien y se lo ofrecemos a Dios tiene un valor infinito y tiene muchos frutos, aunque no siempre los veamos.